Descripción:
Esta publicación es parte de la performance artística The Happening en Instagram.
Esta publicación es parte de la performance artística The Happening en Instagram.
🧠🌦 Pensamiento positivo y negativo y el TDAH.
El TDAH se caracteriza por una disregulación de la dopamina y la norepinefrina, lo que puede llevar a problemas con la atención, la motivación y el control de los impulsos. El pensamiento positivo afecta a estos neurotransmisores y puede impactar positivamente algunos síntomas del TDAH.
1. TDAH y neurotransmisores:
Dopamina: Las personas con TDAH a menudo tienen un sistema de dopamina disregulado, que es importante para la recompensa, la motivación y la atención. La falta de dopamina puede provocar dificultades para mantener la atención y la motivación.
Norepinefrina: La norepinefrina, que es responsable de regular la atención y la excitación, también puede estar afectada en el TDAH. La disregulación en este sistema puede afectar la capacidad de concentrarse en las tareas y controlar el comportamiento impulsivo.
2. Pensamientos y sentimientos negativos:
Dopamina: Los pensamientos negativos pueden alterar el sistema de dopamina y llevar a la anhedonia, que es una disminución del interés en actividades que normalmente resultan placenteras.
Norepinefrina: Los estados emocionales negativos pueden aumentar la producción de norepinefrina, lo que puede resultar en mayor estrés y ansiedad. El estrés crónico puede interrumpir aún más la regulación de la norepinefrina y afectar negativamente el estado de ánimo.
El cerebro humano tiene una tendencia natural a priorizar los pensamientos negativos y las amenazas potenciales. Un entorno positivo facilita el rendimiento.
3. El impacto del pensamiento positivo en los síntomas del TDAH:
Dopamina y motivación: El sistema de dopamina a menudo está subactivo en personas con TDAH, lo que conduce a una baja motivación. El pensamiento positivo puede aumentar la producción de dopamina, lo que mejora la motivación y el bienestar, ayudando a afrontar las tareas diarias con más entusiasmo.
Norepinefrina y atención: El pensamiento positivo puede ayudar a estabilizar los niveles de norepinefrina, mejorando la capacidad de concentración y enfoque, y facilitando el manejo de las tareas.
Estrés e impulsividad: El pensamiento positivo también puede reducir el estrés, que a menudo juega un papel en el TDAH. Al disminuir el estrés, también puede mejorar el control de los impulsos.
Autoestima y resiliencia: El TDAH puede afectar la autoestima. El pensamiento positivo fomenta un mayor sentido de valía personal y fortalece la resiliencia al centrarse en el progreso en lugar de los fracasos.
Esta publicación es parte de la performance artística The Happening en Instagram.
Más información sobre este proyecto artístico Publicación relacionada en InstagramEste artículo fue creado por Frederic Hilpert
© Pautas de uso de archivos Esta publicación en megagroundsloth.de